Elección de un motor de puerta con cilindros
¿Por qué elegir un accionamiento por cilindro? ¿Cuáles son sus ventajas? Descubra nuestra guía.
Cilindros para puertas batientes.
La motorización de puertas cilíndricas es un mecanismo dedicado a las puertas con hojas batientes. Este tipo de motorización consta de 2 gatos que se fijan por un lado en los pilares del portón y por otro en cada hoja del portón.
La Motorización del portón con gatos es un mecanismo dedicado a los portones con hojas.
El kit de motorización para puerta batiente con cilindros se suele instalar en puertas ligeras de unos 4 metros y 400 kilos en total.
La gran ventaja de este tipo de motorización es en términos de instalación: los gatos ahorran espacio y permiten una instalación relativamente discreta, a diferencia de motorizaciones para puertas batientes con brazos articulados que son mucho más grandes.
¿Cómo funciona un automatismo para puertas cilíndricas?
Los gatos están equipados con un motor que funciona en 12 o 24V. La motorización con tomas no integra la electrónica: la tarjeta electrónica y su parametrización, la conexión de los accesorios adicionales (luz intermitente, fotocélulas,...) se realizan desde una caja remota que se fija generalmente en uno de los dos pilares de la puerta.
Una vez que el motor se activa desde el mando a distancia de la puerta, el pistón del cilindro se extiende para cerrar la puerta y, a la inversa, se retrae cuando la puerta se abre en dirección hacia el interior, es decir, hacia la casa.
Es este pistón el que permite empujar o tirar de la compuerta. Los gatos ejercen bastante presión sobre las bisagras de la cancela, y por ello, la cancela que vaya a llevarlos debe ser robusta y reforzada en los enganches de los gatos. Para este tipo de instalaciones se recomiendan las puertas de hierro, aluminio o madera. En el caso de las puertas de PVC, es necesario asegurarse de que estén reforzadas.
¿Cuáles son las ventajas de un automatismo para puertas cilíndricas?
El operador de portón cilíndrico no es muy voluminoso y sigue siendo relativamente discreto. Además, no se necesita mucho espacio alrededor de los pilares. Los cilindros no tienen una amplitud tan grande como un brazo articulado. Por tanto, la necesidad de espacio es casi inexistente. Estéticamente, las tomas no distorsionan su puerta.
Los gatos también permiten motorizar puertas semipesadas, que miden hasta 4 metros y pesan hasta 400 kilos.
El mantenimiento de los cilindros es muy sencillo: no se requiere ninguna atención especial para los cilindros; el engrase del engranaje helicoidal puede considerarse cada 3 años para un funcionamiento óptimo.
Otra ventaja: ¡el aspecto financiero! Las automatizaciones de puertas con cilindros suelen ser más asequibles que los brazos articulados.
¡Otra ventaja es el aspecto económico!
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